¿Por qué una chaqueta con cremallera y reversible?
Antes de los 5 años, un niño no sabe reconocer el derecho del revés de una prenda de vestir. El equipo de diseño ha concebido una sudadera con cremallera reversible para acompañar en el aprendizaje de la autonomía permitiendo a los niños que se vistan correctamente, eligiendo cualquier lado de la prenda y que además aprendan a subir y bajar la cremallera...
Y otra ventaja que seducirá a los padres: una prenda 2 en 1... ¡imparable contra las manchas!
Cuando los niños quieren vestirse solos
Entre los 2 y los 3 años un niño afirma su necesidad de independencia y de autonomía cuando se viste. Tu "bebé grande" quiere hacer las cosas solito, pero no siempre es fácil porque todavía está aprendiendo cómo realizar todos los gestos necesarios. Cerrar la sudadera con cremallera, ponerse el pantalón jogger del derecho, o ponerse la sudadera sin que se quede atascada la cabeza.... no siempre es fácil cuando eres muy pequeño.
Ayudar a los niños a ser autónomos
Nuestro equipo de diseño se ha fijado el reto de favorecer la autonomía de los niños para que se vistan solitos lo antes posible. Con cremalleras fáciles de manipular, cuellos, materias extensibles y cortes más anchos para no quedarse atascados cuando se ponen las prendas, marcas visuales para ponerse la ropa en el sentido correcto... Una pequeña ayuda para que el niño pueda adquirir poco a poco mecanismos de autonomía.
Con la colaboración de una psicomotricista
Concebimos nuestros productos con el apoyo de una psicomotricista para comprender los mecanismos de la autonomía de los niños y las respuestas que debemos aportar con las prendas textiles. "El desafío es que el niño no se desanime y que no abandone. Debemos proponerle acciones que estén en su campo de posibilidades, para permitirle realizar las repeticiones que se conviertan en automatismo, para que pueda generalizar los gestos”, nos explica Agathe, nuestra psicomotricista colaboradora.
60 minutos diarios de actividad física
Sabías que para crecer sano, tu hijo debe practicar 180 minutos de actividad física al día, según las recomendaciones de la OMS. ¡Incluyendo un mínimo de 60 minutos de moderado a vigoroso después de los 3 años! Realizar una actividad física diariamente desde una edad muy temprana es beneficioso para el desarrollo físico e intelectual del niño. El hecho de aprender unos hábitos de vida saludables limitará los problemas de salud del niño a lo largo de su vida y contribuirá al desarrollo del niño.